Cuando preparamos una ensalada no tenemos por que hacer la ensalada de siempre con lechuga, tomate y cebolla. Muy al contrario, se trata de un plato que te permite dar rienda suelta a tu creatividad y jugar con ingredientes dulces y salados así como con aliños diferentes que resalten su sabor. Y no sólo eso, mezclar distintas texturas es otro valor añadido para nuestras ensaladas. El mango es una fruta tropical con un potente poder antioxidante gracias a su alto contenido en vitaminas E, C y A, El magnesio presente en su composición -10 mg por cada 100 g – ayuda al mantenimiento de unos músculos sanos y unos huesos fuertes. Rico en fibra y pectina, contribuye a regular los niveles de colesterol sanguíneo. Su composición en hidratos de carbono es bastante elevado – 15,3 g por cada 100 g – motivo por el cual el aporte calórico, tratándose de una fruta, es considerable – unas 60 calorías por cada 100 gramos –
Por otro lado, lo más destacable del aguacate es que es un fruto muy rico en grasas saludables – grasas monoinsaturadas como el ácido oleico y Omega 3- De hecho a pesar de su poder calórico – 200 calorías por cada 100 gramos- es muy recomendable por los beneficios que nos aporta e incluso un consumo moderado de aguacate es beneficioso en las dietas de adelgazamiento ya que tiene un alto poder saciante. Al contrario que el mango, el poder calórico del aguacate se debe a su contenido lipídico y no a los hidratos de carbono cuya proporción es anecdótica – 0,4 g por cada 100 g –
Esta ensalada es perfecta para llevar en tupper si tenemos la precaución de llevar el aliño aparte y ponerlo justo antes de comer.
Ingredientes:
- 1 mango
- 1 aguacate
- unas hojas de lechuga
- 150 g de un buen jamón serrano
- sal, zumo de limón y aceite de oliva virgen extra para el aliño
Preparación:
Pelamos el mango y cortamos la pulpa en trozos pequeños. Hacemos lo mismo con el aguacate: cortamos por la mitad sin llegar a cortar el hueso, hacemos un giro con las manos y separamos las dos mitades. Retiramos la pulpa de la piel y cortamos en trozos. Lavamos las hojas de lechuga, escurrimos bien para que no queden restos de agua y cortamos con las manos. Preparamos el crujiente de jamón: ponemos las lonchas en un plato y tapamos con otro plato por encima. Metemos en el microondas un par de minutos, si no está, ponemos otro minuto más hasta que quede crujiente. Hacemos el aliño mezclando en un bol tres cucharadas de aceite de oliva con una cucharada de zumo de limón y una pizca de sal. Removemos hasta emulsionar. Montamos la ensalada poniendo la lechuga, el aguacate y el mango. Regamos con el aliño y repartimos el crujiente de jamón por encima.
Su blog es un éxito, muy completo. Ahhh cuando la pasión está ahí, todo es 🙂